Ahora que comienza el calor y el buen tiempo a las mujeres que están esperando un bebé se les puede hacer cuesta arriba.
Por eso en el post de hoy os vamos a dar algunos consejos para cuidarte durante el verano.
Cuidados generales para el verano

- Tomar el sol
Durante el embarazo hay que tener especial cuidado con el sol, ya que es muy frecuente que salgan manchas en la piel debido al aumento de la pigmentación de la piel por diferentes hormonas del embarazo.
Hay que tener especial cuidado con la cara y la linea alba del abdomen, por lo que debemos protegernos del sol, ya sea con cremas solares, ropa de algodón, sombrero, etc…
También es muy importante tomar el sol en las horas donde éste sea menos dañino para recibir vitamina D, pero siempre con protección solar. - Playa o piscina
Hay que tener cuidado con llevar el bañador húmedo después del baño, ya que es muy fácil coger una infección por hongos, cistitis u otro tipo de infecciones en la vía vaginal o rectal.
Por lo tanto deber tener a mano una prenda de baño o ropa seca para después de bañarte.
Molestias frecuentes del embarazo en verano

- Edema de pies y manos
Es muy común que con las altas temperaturas las embarazadas sufran de edema en manos y piernas, os vamos a dar varios consejos para evitar el edema o mejorarlo.
– Debes evitar estar muchas horas de pie o quieta ya que favorece la acumulación de líquidos.
– Si viajas en avión o coche intenta estirar las piernas de vez en cuando y parar para estirarte y activar la circulación.
– Bebe suficiente líquido y no abuses de los alimentos salados
– Intenta acudir a un fisioterapeuta especializado en drenaje linfático manual para realizar masajes que te ayuden a eliminar el exceso de líquido y también realizar auto masajes en dirección pie a muslo. También puedes usar medias de compresión.
– Es muy importante realizar ejercicios circulatorios para favorecer el retorno venoso, tanto en las manos como en las piernas, con ellos ayudaras al retorno de líquidos y disminuirá la pesadez. Además también puedes realizar baños de contraste con agua tibia y agua fría (nunca caliente). - ¿Te encuentras cansada?
Puede ser debido a que no descansas bien o que tengas la tensión baja, estos síntomas son muy frecuentes debido a la llegada del calor. También tienes que tener en cuenta en tus revisiones ginecólogicas que no haya otros problemas como la diabetes gestacional o la anemia por falta de hierro.
Es muy importante que descanses bien, si es necesario y lo necesitas puedes echarte una siesta, ya que es normal que tengas mas sueño durante el embarazo.
Debes cuidar tu alimentación y tomas alimentos que te ayuden a sentirte ligera, además si lo necesitas puedes tomarte un café de forma puntual si lo necesitas. - Es muy importante que descanses por la noche
Dormir bien por la noche nos ayuda a disminuir el edema en brazos y piernas y evitamos otros problemas como dolores de espalda, dolores en la pelvis, nos ayuda a levantarnos descansados para un nuevo día. Algunos consejos que puedes seguir son:
– Evitar cenar tarde y que no sea una cena copiosa, evitar alimentos pesados, que den gases, acidez, frituras,…
– Sal a caminar por la noche cuando baje la temperatura y aprovecha para realizar deporte como la natación, ejercicios de movilidad de la pelvis, ejercicios de fortalecimiento muscular.
– Intenta dormir en una habitación fresca con buena ventilación, duerme con ropa ligera que no te comprima y evita dormir con aire acondicionado, si puede ser dormir con un ventilador pero que no te de directamente.

cena ligero 
Diabetes gestacional
Ante los dolores de espalda…
Es muy frecuente, sobre todo durante el último trimestre del embarazo, que aparezcan dolor en la zona lumbar, en la sínfisis del pubis, en la pelvis, en la zona dorsal, debido al aumento de peso del bebé, del útero y de las mamas.
Es recomendable que te pongas en manos de un fisioterapeuta especializado en obstetricia para que te ayude a prevenir este tipo de molestias realizando ejercicio físico. Nosotros los fisioterapeutas recomendamos empezar a realizar actividad física a partir de la semana 12 de embarazo para reforzar nuestra faja abdominal, nuestro suelo pélvico y además movilizar la pelvis para que se vaya adaptando a los cambios durante el embarazo.
Durante el tercer trimestre es muy frecuente que aparezcan dolores a nivel púbico y lumbar debido al peso como hemos dicho anteriormente, se recomienda utilizar el cinturón pélvico siempre que vayamos a realizar alguna actividad que nos resulte muy pesada o vayamos a estar muchas horas de pie, si no es así se recomienda no llevarlo y activar nuestra musculatura.

Aprovecha el buen tiempo para realizar deporte
Es muy importante que durante el embarazo estemos activas ya que evitaremos las molestias que hemos citado anteriormente. El realizar ejercicio físico nos ayuda a que nuestro cuerpo lleve mejor el proceso y cambio durante el embarazo y ademas nos ayuda a tener una buena forma física para el postparto.
Como hemos citado anteriormente realizar ejercicios nos ayuda a prevenir el edema, prevenir molestias como la lumbalgia o la ciática, nos ayuda a activar nuestra circulación y muy importante nos ayuda mucho a no sentirnos fatigadas y cansadas durante el embarazo.
Debemos realizar deporte evitando las horas centrales del día, ya que son las mas calurosas. Podemos realizar natación ya que nos ayuda mucho a reforzar la faja abdominal y nos ayuda al retorno venoso, yoga para realizar estiramientos y trabajar la respiración (es muy importante mantener nuestro diafragma relajado), salir a caminar (nos ayuda al descenso del bebé), pilates, etc…

¿Y nuestro suelo pélvico?
Dentro de la rutina diaria de ejercicios que te paute tu fisioterapeuta siempre tienes que incluir tu suelo pélvico, ya que si mantienes tu periné con un buen tono muscular evitaremos la temida incontinencia urinaria durante el embarazo y el postparto.
Además en cualquier momento del día, como por ejemplo tomando el sol en la playa, puedes realizar ejercicios de kegel siempre acompañados de la respiración y de una buena contracción de tu transverso abdominal.
Recuerda que una mala activación de tu suelo pélvico puede conllevar diferentes disfunciones como la debilidad del periné, la incontinencia urinaria, el prolapso genital, disfunciones sexuales, etc…
Si no sabes localizar tus músculos del suelo pélvico te recomiendo que acudas a un fisioterapeuta especializado para que te realice una valoración y te enseñe como realizar los ejercicios correctamente.
Además es fundamental prepara nuestro suelo pélvico para el día del parto y así evitar desgarros y la temida episiotomía. Para ello tu fisioterapeuta te podrá enseñar a realizar el masaje perineal correctamente, también a partir de la semana 32 es conveniente trabajar con el EPI-NO para estirar tu suelo pélvico y enseñarte a realizar el pujo de manera correcta.

